Caracas, 22 Jun. AVN.- Estados Unidos confirmó que su fuerza aérea ejecutó un ataque a instalaciones nucleares en Irán, específicamente en los sitios de Fordow, Natanz e Isfahán, una operación que generó una ola de condenas internacionales y tensiones diplomáticas. De acuerdo con declaraciones del secretario de Defensa, Pete Hegseth, la acción se realizó “sin objetivos civiles” y fue planeada en total secreto durante semanas.
“Destruimos el programa nuclear de Irán”, afirmó Hegseth, asegurando que la operación no estuvo dirigida ni al ejército ni al pueblo iraní. Según reseñó la agencia Sputnik, el ataque se ejecutó con bombarderos estratégicos B-2 Spirit y municiones antibúnkeres GBU-57. También se utilizaron misiles de crucero Tomahawk, de acuerdo con Fox News.
El presidente, Donald Trump, indicó que tras los ataques, Teherán debe aceptar poner fin a esta guerra. Sin embargo, desde Irán se sostiene una posición completamente opuesta. La Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI) denunció que la ofensiva de Estados Unidos constituye una grave violación del derecho internacional, y aseguró que el país no detendrá el desarrollo de su industria nuclear.
Por su parte, el canciller Seyed Abbas Araghchi advirtió que Irán se reserva todas las opciones para defender su soberanía e intereses. Exigió la convocatoria urgente del Consejo de Seguridad de la ONU y una sesión extraordinaria de la Junta de Gobernadores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), con el fin de hacer responsables a quienes ordenaron y ejecutaron el ataque.
A pesar del impacto del bombardeo, el OIEA informó que no se ha registrado un aumento en los niveles de radiación fuera de las instalaciones afectadas. Asimismo, países como Arabia Saudí y Kuwait no han reportado anomalías tras los hechos.
Irán sostiene que el operativo se realizó en coordinación con Israel, cuyas fuerzas armadas han venido atacando sitios militares iraníes desde el pasado 13 de junio. Según el Ministerio de Salud de Irán, estos ataques han causado más de 430 muertos y 3.500 heridos. Las acciones de represalia iraníes, de acuerdo con datos del Ministerio de Salud israelí, han dejado hasta ahora 25 muertos y más de 2.800 heridos.
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