Caracas, 16 Oct. AVN.- El gobierno venezolano presentará este jueves una denuncia formal ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y al secretario general António Guterres, en respuesta a las recientes declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, quien confirmó haber autorizado operaciones encubiertas de la CIA en Venezuela y no descartó ataques terrestres en el país.
La acción diplomática busca exigir la “rendición de cuentas” del gobierno estadounidense y solicitar la “adopción de medidas urgentes que impidan una escalada militar en el Caribe”, según informó la misión permanente de Venezuela ante la ONU.
El presidente Trump declaró desde el Salón Oval que dio luz verde a la CIA para actuar en Venezuela, alegando que el país “envió criminales” a Estados Unidos y que “mucha droga” cruza hacia su territorio.
Aunque evitó confirmar si el presidente Nicolás Maduro sería un objetivo directo, medios como The New York Times revelaron que las operaciones podrían incluir acciones letales como parte de una campaña para derrocar al gobierno venezolano.
El Ejecutivo venezolano calificó las declaraciones como “belicistas y extravagantes” y denunció que constituyen una “gravísima violación del Derecho Internacional y de la Carta de las Naciones Unidas”. En paralelo, el presidente Maduro recordó los antecedentes de golpes de Estado promovidos por la CIA en América Latina y advirtió que “América Latina no será sometida por ningún imperio”.
La tensión se incrementó tras el vuelo de dos bombarderos B-52 estadounidenses en el sur del Caribe, cerca de zonas con presencia militar venezolana. Aunque el Pentágono no emitió comentarios, Caracas interpretó la maniobra como una provocación directa. Ese mismo día, un vuelo de repatriación de migrantes venezolanos desde Texas fue cancelado, presuntamente por la presencia de los bombarderos.
Actualmente, Estados Unidos mantiene un despliegue militar de aproximadamente 10.000 soldados en la región, junto con ocho embarcaciones de guerra, un submarino y un contingente de infantes de Marina a bordo del USS Iwo Jima. Venezuela considera esta presencia como una “amenaza militar directa” bajo el pretexto de operaciones antidrogas.
La denuncia ante la ONU se suma a las acciones internas del gobierno venezolano, que esta semana activó las Zonas Operativas de Defensa Integral (ZODI) en Caracas y Miranda como parte del Plan Independencia 200, reforzando la defensa territorial frente a lo que considera una agresión imperial.
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